18 cosas que las mujeres no necesitan justificar.

Hoy navegando por Internet encontré una nota con el título que ésta misma lleva, y exponen situaciones que como mujeres muchas veces sentimos la necesidad de explicar pese a que esto no sea necesario, encajemos con lo que la sociedad espera de una mujer o no, échale un ojo y trata de aplicarlo, será liberador.

NO TIENES POR QUÉ JUSTICAR:

1. Ponerte a ti misma en primer lugar. Cuando Barbara Walters le preguntó a Michelle Obama si era egoísta que ella abiertamente hiciera de sí misma su primera prioridad, respondió: “No, no, es práctico…. muchas veces estamos bastante bajas en nuestra propia lista de prioridades porque estamos tan ocupadas cuidando al resto. Y una de las cosas que quiero que mis niñas aprendan es a invertir en sí mismas tanto como invierten en los demás”. Éste primer punto captó mi atención inmediatamente, es verdad, como mujeres casi siempre se pone el trabajo, los padres, los hijos, la pareja, los amigos y un sin fin de cosas más por delante de uno misma, ¿cómo puedes ayudar a otros si no te encuentras bien tu?. 

2. Qué tanto o poco estás comiendo, sobre todo si es “no saludable”. Puedes comer un gran almuerzo sin tener que decir “no he comido nada en todo el día” o comerte unos deliciosos nachos sin decir “me merezco totalmente esto, me porté tan bien esta semana, voy a comenzar la dieta de nuevo mañana”. Más importante aún, no deberías tener que ser interrogada siempre con “¿Eso es todo lo que vas a comer?” o “¡¿Te vas a comer todo eso?!”. Este tipo de comentarios pueden ser completamente dañinos, sobre todo en una época donde los desordenes alimenticios y la baja autoestima están a la orden del día, por lo que no debes sentirte mal por que te interroguen por ello, es más, si te vez en ésta situación, dale la vuelta, comer poco no significa estar sana como tampoco comer de más lo está, sin embargo tu debes conocer tu cuerpo y si eso es lo que pide hay que oírle.

3. Tener una alimentación sana por salud, no por perder peso. Por alguna razón, las personas tienden a ser escépticas de que una mujer en realidad sólo quiera tratar bien a su cuerpo y no estar perpetuamente preocupada de su peso, ignora éstos comentarios en tu búsqueda por la salud, por desgracia el león cree que todos son de su condición, obviamente en una sociedad que gira en torno a la apariencia física quienes te vean hacer algo saludable para ti no lo atribuirán a salud sino a apariencia, sin embargo ignora lo que puedan o no pensar, recuerda que la única persona que estará contigo siempre eres tu misma, mejor tratarte bien de ahora en adelante, ¿no lo crees?.

4. No tener la fiebre del bebé. No eres más o menos mujer -o persona- si tener un hijo no es para ti. No deberías tener que respaldarlo con razones de que no tienes instinto maternal, pero tal vez lo consideres en el futuro porque “¡quién sabe, tal vez algún día!”, cuando realmente sabes que no quieres niños, pero no quieres ser catalogada como un monstruo sin corazón. Cada mujer es diferente, olvida el que dirán y se valiente al enfrentar le mundo, de todas las personas que se inmiscuyan en éste tipo de decisiones y opinen sólo porque es gratis, ¿cuántos te ayudarían en la crianza y manutención de un niño?... Veras cuan liberador es simplemente decir lo que realmente quieres. 

 5. Tener la fiebre del bebé. Nadie debería tener que pasar por un interrogatorio cuando proclaman que, en efecto, quieren tener niños siendo aún jóvenes, ya que es igual de aceptable sentirse de esta manera, como lo es la alternativa. Simplemente no olvides que tener un niño no es labor de un día, piensa bien antes de tomar una decisión que cambiará tu vida definitivamente. Si quieres viajar, viajarás. Si quieres seguir una carrera, además de la maternidad, deberás seguir. Sólo se consiente que quizá el camino sea un poco más difícil con un bebé entre brazos y que éste no tiene por que se dejado de lado o bajo cuidados de alguien mas si haz sido quien realmente ha tomado esta decisión. Mientras estés enterada de las consecuencias y estés dispuesta a aceptarlas, no necesitas darle una justificación adicional a personas que no se sienten de la misma manera.

6. Si estás o no estás teniendo relaciones sexuales, y hasta qué nivel. No tiene por qué haber una razón de por qué te acostaste con fulano de tal, y no tienes que sentirte obligada a dar una excusa de por qué te has mantenido célibe. Sólo no olvides cuidarte a ti misma, recuerda que las relaciones sexuales te acercan a un embarazo o alguna enfermedad de transmisión sexual si no tienes los cuidados pertinentes.

7. Disfrutar de lo que, de otro modo, se llamarían placeres culpables porque son “cosas de mujeres”. Estos no tienen que ser placeres “culpables”, pueden ser sólo placeres. Puedes disfrutar de ir a pintarte las uñas y usar una falda y volver a ver “13 Going On 30” (“Si yo tuviera 30”) mil veces y sin caer en estereotipos.

8. “Verte mal hoy”. Cuando una mujer sale de la casa sin arreglarse y se encuentra con alguien conocido, o es visitada por sorpresa y no esta despampanante tiende a sentir la necesidad de pedir disculpas por ello. No tienes que pedir perdón a alguien por no ser de cierta manera, tienes que pedirte disculpas a ti misma por sentir eso.

 9. Experimentar con la sexualidad. Si experimentaste alguna práctica sexual diferente no tienes que justificarla con un “ estaba perdida y confundida” o con un “fui una chica salvaje y loca en la universidad.” Si estabas con una chica en una fiesta fue porque era divertido, o en otro caso, si es más que eso no te avergüenzes de ello, es tu sexualidad, vívela como más te plazca.

10. El peso. La talla realmente no determina lo que “una verdadera mujer” es o no es.

11. La cantidad de maquillaje usado en un día determinado. Si quieres estar al natural, hazlo, y si quieres parecer como si estuvieras en un show de ficción, puedes hacerlo también. Tu cara. Tus reglas.

12. La elección de ropa. No tienes que decir que usas leggings “porque son muy cómodos”, o un vestido muy corto, porque “quieres tener una noche loca.” Estas cosas no requieren de ninguna explicación, y no debes dejar que otras personas te presionen a sentir eso.

13. Estar molesta por algo que implica una respuesta emocional. No tienes que pedir perdón por sentir algo o expresar algo que en realidad no sientes. La gente que te juzga por ser un ser humano y tener emociones, es la que debe pedir disculpas.

14. Cambiar una relación si ya está invertida y lista … o simplemente poner una relación primero si es una cosa saludable y feliz o algo en lo que tu quieres/necesitas trabajar. Hay una gran diferencia entre ser pisoteado y participar de igual a igual en una relación, un papel que normalmente requiere de compromiso y esfuerzo.

15. Querer casarse joven.

16. No querer casarse joven.

17. Ser atractiva a pesar de algo. No tienes que justificar tus llamadas – imperfecciones con aquellas cosas que te gustan de ti – no eres atractiva porque tienes un hermoso pelo a pesar de tener un poco de sobrepeso. Puedes ser atractiva sin tener que encajar en las convenciones sociales. La escala continua de belleza fue construida para hacernos sentir como una mierda y comprar un montón de productos para arreglar eso.

18. Pasar los “plazos sociales” de las cosas. ¿A quién le importa si tienes 35 y sigues igual de soltera que hace 15 años? La vida no se inicia cuando llega alguien o algo y entonces la sociedad dice que puede empezar. No tienes que dar excusas de por qué no estás casado o con hijos o trabajando. Nuestras vidas no están destinadas a ser escritas todas iguales. Cuando aceptas la narrativa de otra persona, es porque no te estás escuchando a ti mismo con la claridad suficiente.

El original de ésta nota fue encontrado aquí.